Ojalá nunca te hubiera visto,
porque al primer encuentro
mi corazón se llenó de tu ternura y belleza
de la cual nunca podré escapar.
Mi amor hacia ti es considerable
como ambos sabemos que es incensurable
por cualquier cosa que se nos interponga.
Pero ahora, aquí,
por haberte amado
en la calle estoy;
debajo de una tormenta
de la que no saldré hoy.
Porque “dificultades”,
es solo la palabra a la que estoy ligado,
porque exclusivamente en este querer
de estas cosas hay.
Porque no hay nadie más que tú para saber,
y sobre todo, conocer,
la amargura por la que estoy pasando.
Únicamente eres tú
quien la puede cambiar por felicidad,
arraigando nuestro amor eterno.
Tan sólo con una mirada
mi espera será recompensada
y toda la vida junto a ti aprovechada,
durante cada segundo de mi respiración.
Pero si tu llamada esperar se hace,
mi vida al otro mundo ojalá pase,
para no sufrir más sin ti…