Aún
espero que descubras mis grandes defectos, pero
para ello nos hace falta tiempo, algo que aún no tenemos.
No
sé si eres especial, eso ya se verá, lo que sí te confieso es que
contigo no encuentro palabras cuando te intento hablar.
Es
algo que no logro asumir. Tener tanto guardado y no saber expresarlo
no era propio de mí. Me está enloqueciendo hallarme en el limbo y
no saber salir.
No
soy quien para decirte nada, pero esto sería más fácil si
estuviéramos cara a cara. Ya que todas las palabras nos serían
innecesarias.