Mucha gente me pregunta, cómo soy capaz de escribir
estas cosas. Es tan fácil de comprender como difícil de traducir.
Supongo que todo reside en esa vieja libreta donde escribo, corrijo, tacho o
elimino, cada día de mi vida. Ese gran momento en el que la tinta fluye por el
papel con ansia de ser libre. Ahí se crearán letras, palabras y oraciones
desatadas. Ahí se hallará mi vida resumida, en situaciones de cada día. Lo que comenzó siendo un medio para expresar lo que sentía y desatarme de estas venenosas
cadenas, se fue convirtiendo dulcemente en mi libertad.