miércoles, 3 de julio de 2013

Adiós instituto


Va a ser duro dejar atrás los momentos con esas personas que tanto quiero. Las risas en clase y las disparatadas conversaciones de los recreos se van, y con ellas un cachito de cada uno de nosotros. Fueron unos años duros. Demasiadas horas bajo el flexo, donde no tenía cabida el sueño. ¿Pero realmente valió la pena? Claro que sí.
Porque en ningún lugar volveremos a toparnos con unos profes, ¿cómo decirlo? Honestos, generosos, serviciales, humildes y en algunos momentos hasta psicólogos. Sin malas caras por perder sus recreos escuchando nuestras quejas y problemas por los malditos ejercicios de historia, el incierto futuro que nos espera o lo difícil que están siendo estos años.
¿Y sabéis qué? Me llamaréis loco, pero sólo por nuestras risas y locuras, valdría la pena repetirlo todo.
Gracias hermanos!! Nunca os olvidaré.

Sol de Portocarrero

lunes, 1 de julio de 2013

Entre nosotros no existen las palabras

Nosotros no somos perfectos sino seres opuestos. Tú vives el día y yo la noche, así son las cosas, no busques reproches. Fue mi condena por haberte conocido, ser tan opuestos y tan parecidos. Pero qué más da que esto sea así si somos felices, tú sin mí y yo sin ti. Grandes momentos compartimos y son esos segundos los que se guardarán en nuestros pequeños cerebros. 
En algún  instante nos distanciaremos para darnos cuenta de cuánto nos echamos de menos. Pequeñas cosas que faltarán en nuestro día a día. Por ejemplo tus palabras con doble sentido o  las picardías en las que nunca caía. Adornos que hacen más divertida la vida. Pero todo tiene un límite, una fecha proscrita. Aquí llega tu verdad, entre nosotros no existirán palabras ni hechos ni miradas salvo que un milagro se cumpla.


lunes, 27 de mayo de 2013

Invítame a otro amanecer


Deja a un lado los pedazos del corazón, la fe buscada y las caras perdidas. Todo se ha convertido ahora en cosas que recordar, cuando apagas la luz y la vida se enciende en tu cabeza. Justo en los momentos en los que no puedes dormir porque tus ojos no tienen sueño. Justo esas noches en las que debes descansar y reponer fuerzas. Y todo por culpa de esas arpías que llegan sin avisar, ¡y cómo llegan! Sólo el diablo puede dar poder a tal enmienda. Mas no sólo caen en cualquier instante, sino que además repiten noche tras noche las mismas imágenes, las mismas personas, las mismas palabras, como en un disco rayado que no para de dar vueltas en su gramófono.

Triunfa la noche y su madrugada, pero no el sueño que anhelabas sino lágrimas que recorren tu cara de lado a lado por la mañana. Irritados tus ojos, amanece un nuevo día. Curvas tus labios y les sonríes a las arpías, porque se han ido, ya se han ido de tu vista.

El espejo sin embargo continúa borroso al mostrar tu rostro. Pero eso qué importa ya, cuando lo tengan que saber ya lo sabrán.


sábado, 18 de mayo de 2013

Tu vida está conectada con la mía


Por todos aquellos que no se rinden sin antes conseguir lo propuesto, o por los que se pierden en el intento. Por los que ríen por no echar a llorar, o por los que se echan las manos a la cabeza por no tener las soluciones en sus manos. Por los que se enamoran fácilmente, o por los que prefieren no hacerlo, hasta que caen. Por todos aquellos que mantienen viva la esperanza, o por los que ya la han dado por perdida, ahogada y hundida. Por los que se han cansado de esperar y comienzan a cambiar. Por las pequeñas personas, que al fin y al cabo son grandes por ese algo especial que mantienen en su interior. Por los deseos que están a punto de cumplirse, o por aquellos que ya se cumplieron. Porque un día aprendí que todos somos diferentes y a la vez iguales. Porque siempre habrá algo que nos mantenga unidos, algo que nos haga compartir esto que llamamos vida. Por ejemplo este aire que respiras, este cielo azul que iluminas o esas miradas prohibidas que cruzamos cuando nadie nos mira.

martes, 14 de mayo de 2013

Cada cual en su lugar


Nos empeñamos en cosas sin sentido. En creer que lo bonito es mejor, y lo feo es lo que nos hunde. En depender de cosas materiales que para nada nos harán felices. En pensar que un cacharro calmará nuestra impotencia, y hará olvidarnos de los problemas que surgen en la vida. En empeñarnos hasta que tengamos ese móvil, ese ordenador o esa casa, simplemente porque mi amigo o mi vecino lo tengan.

¿Sabes? Lo mejor no es eso. Lo mejor es levantarse, y tener a alguien al lado que te diga "Buenos días, ¿qué tal has dormido hoy?”. Lo mejor es ir por la calle, y que te miren, te saluden y te sonrían e iluminen tu día. Lo mejor es que te llame tu amiga para darte una buena noticia, o simplemente para escucharte porque en ese momento se acordó de ti. Lo mejor es tener a alguien que merezca la pena, que no sea falso ni hipócrita y te haga creer cosas que no son. Las verdades a la cara aunque duelan. Y a tomar por culo las mentiras, con mentiroso incluido.

Porque el tiempo está para ser aprovechado y nada ni nadie podrá decir lo contrario. Yo vivo de pequeños instantes que te hacen sentir cosas maravillosas que nunca olvidas. El mundo, la vida, y las acciones que hagamos en un momento determinado, pondrán a cada persona en su lugar, a cada nube en su cielo, a cada rey en su trono, a cada perdedor en su banquillo, a cada payaso en su circo, y a cada puta en su esquina. Y si aún no tienes claro cuál es tu rincón, ya sabes por donde empezar a buscar, porque parece que éste no es tu lugar.



domingo, 5 de mayo de 2013

Mi madre siempre será la mejor


Madre. Esta palabra sobrepasa todos los límites de amor, ternura y entrega incondicional. Jamás en la vida encontrarás un amor mayor ni más profundo o desinteresado que el de una madre.
Ella es la que te apoya, la que confía y cree en ti, aunque todo el mundo deje de hacerlo. La que siempre te perdona, y deja que te equivoques de vez en cuando para que aprendas de tus propios errores. Si bien se le desgarre el alma al hacerlo y después deba llorar contigo. Porque ella siempre antepone todo en su vida para que seas feliz.
Y aquí van las miles de veces que te pide explicaciones después de llegar tarde, o entrar con la cabeza gacha, si bien ella no las necesita, ya que con sólo mirarte sabe si estás abatido o radiante, si tienes problemas o todo te va de maravilla.
En estos momentos me doy cuenta de lo importante que eres para mí y te doy las gracias por ser así, auténtica y única. Gracias por ser el pilar en el que se apoya mi vida, la cuna donde empezaron a brotar mis sueños, la medicina que cura mis heridas y la persona que me enseñó a vivir a mi manera. 
Porque el primer paso dicen que es el más importante. Aquél que di agarrado de tu mano, y al que seguro seguirán otros muchos a tu lado en un futuro no demasiado lejano.


martes, 30 de abril de 2013

Principios vacíos


No siempre se ganan las batallas en las que el objetivo a conquistar es un corazón. Y con esto no me refiero al resultado final, hacia dónde queda la balanza, si pudo salir bien o mal, sino al esfuerzo que pusimos con cada palabra, con cada lágrima derramada, para intentar asediar algo que desde el principio habíamos perdido. Crédulos por no prestarle atención a lo verdaderamente importante.
Yo mismo me encierro en esa lista de personas que quisieron hacer de su vida un cuento con final feliz, donde las perdices nunca fueron comidas, donde los príncipes y princesas siempre fueron dibujos de revista, donde la realidad se chocó de bruces con mi vida.
Porque no hay finales felices sino principios vacíos.